Asesinan a un niño albino en Burundi p/prácticas de brujer

Los cazadores matan a sus víctimas para utilizar su sangre y partes de su cuerpo en la elaboración de pociones.

Un grupo de hombres armados asesinó ayer jueves a un niño albino de doce años de edad en el distrito de Kiganda, en el centro de Burundi, aparentemente para utilizar partes de su cuerpo en actos de brujería. Los cazadores de albinos matan a sus víctimas para utilizar su sangre y partes de su cuerpo en la elaboración de pociones.

Los curanderos aseguran a sus clientes que les ayudan a tener suerte en el amor, la vida y los negocios. "El niño albino, de doce años de edad, fue asesinado por cuatro hombres armados con pistolas y cuchillos. Cortaron su mano izquierda y huyeron con ella", declaró este viernes a Reuters un responsable del gobierno local de Kiganda (a 80 kilómetros de la capital, Bujumbura), Joseph Ntahuga.

Ntahuga precisó que la víctima tenía otros dos hermanos albinos. En Burundi hay alrededor de 500 albinos para una población de ocho millones de habitantes. Con el de ayer ya son catorce los asesinados desde 2008.

Las autoridades creen que los autores de estos crímenes son vecinos de la zona que trabajan con curanderos en la vecina Tanzania, un país en el que habitan alrededor de 170.000 albinos y en el que desde 2007 han sido asesinados y mutilados al menos 53.

El presidente la asociación nacional de albinos, Kazungu Kassim, denunció este viernes que estos crímenes continúan cometiéndose en Burundi debido a que las autoridades no castigan a sus perpetradores con suficiente dureza. "La solución es condenar a la horca a los responsables del asesinato de albinos, como se hace en Tanzania", declaró. Un hombre fue condenado a la horca en Tanzania por asesinar a una niña albina de cinco años de edad, a la que cortó sus dos piernas con un machete y bebió su sangre.