Alessia Mancini quedó afuera. La prensa de espectáculos de ese país había divulgado que era trans. La joven de 24 años lloró antes de irse del certamen.



Una gran polémica se desató en el certamen de Miss Italia 2010, luego de que la postulante por la región Lazio, Alessia Mancini, fuera eliminada por ser supuestamente transexual.

Esos rumores –que la prensa italiana publicó argumentando que había una infiltrada que mide 1,84 metros y tiene los hombros anchos– habrían influenciado entre los telespectadores para que le dieran la espalda a la joven de 24 años, que lloró en pleno escenario al retirarse del concurso.



“¡Es una cosa muy fea! Han dicho que soy un trans... No es nada malo y todo el respeto para ellos, pero no lo soy. Existen personas malas y envidiosas. Es una maldad que psicológicamente te puede destruir y no lo tolero”, dijo Mancini.

La periodista Selvaggia Lucarelli había escrito en su blog que la mujer nacida hombre es una joven de 24 años, Miss Lazio, de altura "sospechosa": 1,84 metros.

La sospecha fue suficiente para que el país se dividiera a favor y en contra de la participación de una mujer "no de nacimiento" en la competición, que se celebra en Salsomaggiore Terme desde 1939.

Por su parte, la organizadora del Miss Italia, Patrizia Mirigliani, apoyó a la ex candidata. “No nos consta que alguna participante haya cambiado de sexo. Si lo llegáramos a saber, sería expulsada”.

El reglamento dice que solo quien es mujer desde su nacimiento puede participar (ya en 1992 una transexual fue expulsada, a pesar de haber sido preseleccionada).

Unos tres millones y medio de personas miraron en vivo y en directo el comienzo de la elección de la más linda, en el que se vieron desfiles y entrevistas a las concursantes. Y el rating subió con la polémica concursante que no pudo contener las lágrimas en teve.