Un clásico en toda regla:  Que decir de este juego que no haya sido ya escrito. Es uno de los grandes, uno de los primeros juegos que nos ofrece una libertad para movernos y explorar el escenario sin límites. Tenemos 3 bandas de mafiosos en la primera zona y según vayamos completando misiones podremos acceder a nuevas zonas de la ciudad (hasta un total de 3) y cumplir misiones para nuevas bandas (hasta un total de 7 organizaciones mafiosas).


Libertad total: Lo más grande de este juego es que podemos hacer cualquier cosa que nos apetezca, desde explorar la ciudad encontrando un montón de cosas: desde un tanque hasta los símbolos de GTA en las azoteas de los edificios pasando por misiones extras que nos mandarás matar 5 policías en un minuto o 40 civiles en 2 minutos y un montón de cosas más. Podemos por ejemplo dedicarnos a matar policías hasta que nos persiga el ejército por las calles de la ciudad o simplemente cumplir las misiones que nos encomienden las mafias de cada zona.


Música y sonido: Cada coche suena de una forma especial y teniendo en cuenta las limitaciones técnicas de la época, es todo un lujo escuchar las sirenas de la policía o las ambulancias cuando se acercan y poder encenderlas o apagarlas a nuestro gusto una vez hemos robado el vehículo. No existen montones de emisoras de radio en los coches como pasa en San Andreas


Vista de pájaro: Ahora nos parece extraño encontrarnos un juego con este punto de vista pero la verdad es que nos permite controlar todo lo que sucede a nuestro alrededor y observar los ítems “escondidos” en los tejados y terrazas de los edificios.


Parque móvil: El juego dispone de un montón de vehículos, desde los propios de cada banda, a los de policía, tanques, taxis, ambulancias… y cada uno tiene sus características, pasando por velocidad, aceleración, resitencia a los golpes y facilidad para explotar (muy útil si nos vemos en un apuro en el que intervengan montones de armas).


Gráficos: Con lo que estamos acostumbrados a ver esto parece (y es) un juego de una generación pasada, pero cuando la diversión rebosa por los 4 costados, los gráficos no importan tanto como parece. Habrá personas a las que les guste más realismo a la hora de jugar para meterse en el papel del protagonista pero la diversión que ofrece este título lo encontraremos contadas veces en nuestra vida.