Bianchi se va de Boca / encuentran reemplazantes para Basile

El Virrey deja su cargo de manager luego de que se negara a ser el reemplazante de Basile. Se lo comunicó a los dirigentes en una extensa reunión que tuvieron anoche en Mendoza. "¿Si me voy? Hoy estoy acá...", dijo esta mañana el Pelado




La renuncia de Alfio Basile no fue el punto final de una serie de cambios de fondo en Boca. Al contrario. Con la ida del Coco, comenzaron otros movimientos más que importantes. Ahora, ayer, el que voló de Boca fue nada menos que Carlos Bianchi. No aceptó ser técnico y también debió dejar su cargo como mánager. La dirigencia lo empujó a un escenario límite: técnico o nada. Y el Virrey quiso nada. Entonces, se trató de una renuncia forzada, cuyo desenlace es muy parecido al del fin del ciclo de Basile: todos dicen por lo bajo que ya es historia concluida, pero falta el anuncio oficial, que será hoy. Se trata de una modificación en Boca que, en principio, fortalece la gestión del presidente Jorge Ameal.

La reunión del final se dio en tierra mendocina, en un salón del hotel Diplomatic Park Suites, con Ameal, con los dirigentes José Beraldi, Rómulo Zemborain y Marcelo London, y con Bianchi, quien vino aquí con su esposa Margarita. Era la última carta que la dirigencia se jugaba para convencerlo de ser técnico. Pero el Virrey no se movió del "no" que ya había pronunciado el viernes. Y volvió a repetir un "falta mucho" cuando le preguntaron si se animaba a prometer que a mitad de año aceptaba ser DT. Le aclararon que si mantenía esa postura debía abandonar su cargo de mánager. Palabras más, palabras menos, "técnico o afuera".

Esa charla concluyó cerca de las 4 de la mañana, con Bianchi prometiendo contestarles tras el Superclásico. Pero todos sabían que se iba. Porque su plan, tal cual contó Clarín hace un par de semanas, era dirigir pero en el mediano o largo plazo, con todo el fútbol de Boca ordenado y con el plantel renovado. No contaba Bianchi con una debacle semejante de Basile en el verano. Imaginaba que eso podía darse después de la quinta o sexta fecha del Apertura y que ahí podría resistir él como mánager y Abel Alves como interino.

Tampoco advertía Bianchi que podría haber una inmensa presión política que condicionara también al presidente Ameal. Lo había anticipado Clarín el sábado: la ida de Basile puso en jaque al Virrey. Es que había varios dirigentes que, si Bianchi no aceptaba ser DT, pensaban renunciar si él continuaba como mánager. Entre ellos, el vicepresidente Juan Carlos Crespi. ¿La razón? Bianchi sumó muy pocas perlas positivas en ese cargo. ¿Para qué gastar casi 800 mil dólares anuales en él? "Si le renunciaba Crespi se iba a quedar con un solo vice (Beraldi), que es macrista ... Ameal hizo esta movida porque se lo llevaban puesto también a él", deslizó un dirigente a Clarín.

Así Ameal, aunque Bianchi era su bandera desde que heredó el poder en Boca tras la muerte de Pedro Pompilio, les dio el gusto a los dirigentes. Y salió fortalecido. Es que los directivos le dijeron: "Si Bianchi no sigue de mánager, te respaldamos a morir". De ese modo, Ameal ganó consenso ahora hasta con los macristas: Beraldi, Zemborain y el tesorero Daniel Angelici. Lógico: Mauricio Macri siempre le disparó al Bianchi mánager ...

Lo concreto es que el domingo en el hall del Diplomatic tuvo de todo. El discurso oficial, a las 11, era: "Estamos metidos en el partido. Los demás temas los resolveremos más adelante". Minutos después, Bianchi, tras ver el triunfo de Roddick ante Fernando González en Australia, se fue con su esposa a misa ... Al ratito, Ameal y London, defensor a ultranza de Bianchi, se fueron solos a caminar.

Con el regreso de todos, Clarín consultó al presidente, quien fue contundente: "No nos dijo nada". Y también se le preguntó a Bianchi, quien fiel a su estilo que obliga a segundas lecturas, anticipó el final: "¿Qué me voy? Hoy estoy acá ..." A buen entendedor ... Los jugadores, paralelamente, buscaban por todos los pisos información. Y Abel Alves se dio cuenta que lo suyo era por este partido. Un parche ...

A la tardecita se especuló con que Bianchi ni siquiera iría al Malvinas Argentinas. Falsa alarma. El Virrey estuvo en el estadio. Llegó como si fuese un partido más, pero fastidioso. Y junto a él, todos los dirigentes. Ni uno ni otros hablaron antes del partido. Había un pacto de silencio hasta hoy que nadie pensaba romper. Es más, Ameal y Bianchi vieron el partido juntos, sentados en la platea, como si nada ocurriera.

Cero título. Escasos aciertos. Muchos conflictos. No es bueno el balance de Bianchi como mánager de Boca, tras 2009 y este enero de una gestión cuyo final se había pactado para diciembre de 2011. Se va antes el Virrey, esta vez con un doloroso "Chau, felicidades".


Diego Cagna, Guillermo Barros Schelotto y Blas Giunta, los candidatos para suceder a Boca






Diego Cagna, Guillermo Barros Schelotto y Blas Armando Giunta figuran en la carpeta de los dirigentes de Boca Juniors como posibles sucesores de Alfio Basile.

agna, ex director técnico de Tigre, ya fue sondeado por los directivos, y cuenta con la preferencia de los dirigentes de menor rango, mientras que Barros Schelotto tiene con la adhesión del presidente Jorge Amor Ameal.

En tanto, el técnico de Almirante Brown, Blas Giunta, también figura en la nomina, y según revelaron a Télam fuentes de la dirigencia xeneize, el objetivo es “conseguir técnico lo antes posible”, por eso tiene chances.

En el caso de Cagna, se supo que el entrenador tuvo contactos con los dirigentes xeneizes, y hasta habría hablado con los referentes del plantel.

En tanto, Guillermo Barros Schelotto, que todavía tiene contrato con el Columbus Crew, viajó ayer a los Estados Unidos, y también fue consultado si le gustaría dirigir a Boca.

Con Giunta los directivos no se comunicaron, pero se supo que también figura en la nómina para conducir al equipo.

                                      Señor Verde Señor Verde Gran sonrisa
 Gran sonrisa Gran sonrisa Señor Verde Señor Verde Señor Verde