No se entrena junto a sus compañeros y el técnico, Pep Guardiola, no puede confirmar su presencia en el choque ante el Atlante mexicano, por el Mundial de Clubes



El argentino Lionel Messi no se entrenó con sus compañeros del Barcelona y se quedó en el hotel trabajando, por lo que sigue siendo duda para el partido de mañana contra el Atlante mexicano en una de la semifinales del Mundial de Clubes.

Messi padece un fuerte esguince de tobillo que ya le hizo ausentarse del partido del sábado ante el Espanyol, de la Liga española, finalizado con triunfo azulgrana por 1-0.

Los médicos del Barcelona reclaman prudencia y no es probable que Messi actúe desde el inicio ante el Atlante mexicano, aunque el delantero quiere jugar.

De hecho, las ganas de Messi reflejan el gran interés que se ha tomado todo el plantel con la disputa de este Mundial de Clubes, el único trofeo importante que el club todavía no conquistó en su centenaria historia.

Así, Josep Guardiola, su técnico, adelantó el entrenamiento de hoy para ver el encuentro entre Estudiantes y el Pohang Steelers coreano, de donde saldrá el primer finalista del Mundial de Clubes.

Carlos Puyol, capitán del equipo, aseguró que se toman en serio el partido.

"Este conjunto ya ha hecho historia. Queremos más y por eso estamos aquí. Puede ser una temporada perfecta. Este es el objetivo: llevarnos también el Mundial de Clubes".

El Barcelona afronta su segunda oportunidad de ganar el trofeo después de que en 2006 perdieran su primera ocasión al caer por 1-0 ante el Porto Alegre brasileño.

Puyol estuvo presente en aquel encuentro y aseguró: "Las ganas ahora son las mismas".

No sólo Messi tiene problemas físicos, otro jugador que podría caerse en el equipo azulgrana es Seydou Keita, quien padece unos pequeños problemas en los isquiotibiales, unas molestias que lo pueden descartar para el encuentro de mañana en Abu Dhabi.

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