Estos cuentos los hizo un pibe que se llama Martin Perez Guerrero de 6 años. Tienen errores de sintaxis pero para tener 6 años, hay que tener esa imaginacion loco.
La noticia salio en la tele de un noticiero Bonaerense, lamentablemente no tengo la fuente ni nada del video ni de la pagina, espero que miren y disfruten de las creaciones de este chico.

El Chico Rapero



Había una vez un chico que era tan rapero que usaba en las dos manos anillos de oro porque el era el hombre que salvaba a los raperos del B° López Carrizo del otro B° que se llamaba La Otra Esquina. Ese hombre era tan valiente que iba al B° de ellos con un grupito de raperos asesinos, ellos iban sin ningún problema porque estaban bien armados y cuando entraban al centro del B° empezaban a matar a todos los que pertenecían a este, robaban autos para escapar o para quedárselos pero la mayoría era para huir de los asesinos de ese B°, pero un día los del B° La Otra Esquina fueron a atacar donde quemaron casas, hogares, escuelas, etc. Pero cuando se dio cuenta el Chico Rapero los fue a atacar a su B° con poquitos raperos, la mayoría se quedaba a defender el B°.
El B° López Carrizo estaba vivo todavía el otro estaba destrozado, niños colgados de ramas, ancianos baleados y todas esas cosas que hacen para matar gente, pero al que más balearon fue a Styven-Doc, porque ese era el dueño de ese B°, primero lo balearon y después lo tiraron de una azotea. A las mujeres las acuchillaron, violaron y balearon. La mayoría las violaban o las llevaban al otro B° para que allí las maten o las violen, cuando llegaron ellos allí con las mujeres el B° todavía estaba siendo atacado y ellos rápidamente se bajaron de los autos y empezaron a disparar.
Finalmente los dos B°, La Otra Esquina y López Carrizo, se destruyeron poco a poco hasta que no quedo nada y el Chico Rapero murió en un auto mientras terminaban de asaltar el Banco Internacional, la muerte fue trágica porque mientras el conducía a su casa, una metralleta que era de la policía, la disparo un hombre llamado Scrauk que fue rapero, les disparo desde lo alto del edificio y al cuerpo del Chico Rapero se le sacaron las balas de adentro de su cuerpo y las contaron y eran 47 balas y se imaginaran como habrá estado el cuerpo.

El Ladrón de Televisores



Había una vez un ladrón de televisores que robaba a estos para vendérselos a un tipo que se llamaba Roco Loco, un hombre que decía la verdad y nada mas que la verdad porque ese hombre de una religión que no mentía.
El ladrón de televisores era un hombre muy prejuicioso porque cuando la policía lo veía sospechoso lo empezaron a interrogar. Hasta que un día, el ladrón de televisores dice voy a hacer mi ultimo robo en el negocio que se llamaba La Casa de los Televisores. Iba a hacer el mejor jamás visto.
El ladrón de televisores ya había robado todos los televisores de esa tienda y se los iba a vender a Roco Loco, pero cuando lo fue a ver a este le dice, yo no compro mas televisores, ahora empieza a vender antes de que la policía te agarre jajaja.
El ladrón de televisores estaba desesperado por venderlos así que empezó a buscar un negocio de compras y ventas, pero ¡Quien compraría tantos TELEVISORES! El ladrón de televisores tenia una opción y nada mas que una opción entregarse a la policía, entonces este se esta por ir de su casa y tocan la puerta eran más o menos 300 policías o quizás más de estos. El ladrón estaba re-desesperado, entonces se le ocurre una idea, era un foquito que se le encendió en la cabeza, agarro a un policía lo cago a trompadas y le saco la ropa y se vistió de policía.
Finalmente el ladrón se arrepintió lo que le hizo al policía y se entrego y juró que en esos 30 años que iba a estar en la cárcel , cuando salga si es que sale no iba a tomar nada pero nada que no sea de él.

El Detective de los Homicidios



Un día un detective fue a investigar un caso de asesinato al empresario Don Gabriel Pereyra el hombre dueño de la red de computadoras con más tecnología del mundo. Lo habían asesinado en el B° Quilmes en la calle Sarmiento al 1600 en Salta en el día de la bandera, la gente quedo sorprendida porque nunca nadie había matado, si robaron, pero nunca asesinaron.
Era un caso del detective Francisco Gómez, el mejor detective de la Argentina. Ahora se va a contar en 1° persona la historia del Detective de lo Homicidios.
Primero había encontrado una lapicera sucia con marcas de una mano, a esta la lleve a la policía para que investigaran quien toco esa lapicera, otras de las pistas que encontré fue un celular tirado al lado del cadáver, lo lleve a ver a nombre de quien estaba, mañana iba a hacer fantástico, voy a hacer muy famoso por que para mañana voy a saber todas las pistas.
Ya era el otro dia y fui a buscar las prueba, la lapicera la toco un policía con guante y el celular se le cayo a un hombre que era empresario, el caso estaba abierto de nuevo, tenia que buscar mas pistas. Hoy seguí a un hombre sospechoso porque llevaba sangre en su abrigo y en conclusión el abrigo estaba al lado del cadáver y este hombre dijo que era de él, también el vive en el B° Porto Alvarez que queda como 150 cuadras de los hechos, es un buen lugar para esconderse del homicidio, es decir, la policía nunca entraría ahí porque el B° Porto Alvarez queda muy lejos del B° Quilmes, entonces en conclusión los carceleros no irían ahí para ver quien mato a Don Pereyra. Después de un rato fui a ver al B° Porto Alvarez a preguntarle a la gente si vio a alguien extraño o algo que no sucede todos lo días y ellos me dijeron que en la calle Lavallen se habían escuchado disparados dentro de una casa y fui a tocar la puerta y cuando me atendieron me dispararon y ellos huyeron, suerte que tenia chaleco antibalas, cuando me levante ya se habían ido lejos del lugar.
Después me fui del B° Porto Alvarez y fui al B° Quilmes porque me habían informado que una familia de apellido Guerrero que vivía en la Sarmiento 1656, dijeron que un chico que se llamaba Martin, el hijo menor, había escuchado unos disparos y había visto de su terraza que los asesinos le habían robado dinero y le pidieron que le deje la empresa a al asesino, pero yo dije que eso es imposible porque el hermano Facundo se hace cargo de la empresa, entonces lo fui a ver y el dijo que no sabia nada y después encontré a unos tipos, y me resultaban conocidos y después pensé en mi cabeza y dije claro eran los tipos que me dispararon, y de pronto yo saque mi pistola y le dispare a uno y el otro huyó y al instante el hermano, Facundo, me dijo que haces y yo le dije le dispare a los asesinos que mataron a tu hermano y tu tambien lo mataste , que te hizo el dije yo y el dijo no me hizo nada pero yo si le hice y eso ahora no me importa y rápidamente saco una pistola y se suicido.
El hermano de Gabriel Pereyra ya estaba eliminado, ahora me faltaba los amigos de Facundo, tuve que ir a la casa otra vez pero esta vez fui con precaución y entre por el techo y ellos ya no estaban, toda la policía los estaba buscando hasta que alguien los vio en la calle y me aviso a mi y yo fui con miles de policías y la casa estaba rodeada, pero de pronto empezaron a disparar y nosotros tuvimos que responder a sus disparos, fue el tiroteo mas grande de la historia Argentina, nosotros los policías, detectives y militares disparábamos a matar y ellos no eran dos, nosotros pensamos que eran dos, yo ya había matado a uno en la casa de Facundo Pereyra y parece que el que sobrevivió llamo a sus amigos asesinos que eran como cien.
Finalmente los matamos a todos y yo fui reconocido que el mejor Detective Privado de Homicidios de la Argentina y al rededores y los maleantes muertos tuvieron un funeral como si hubieran muerto por causa de la naturaleza.

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