El DT admitió que lo entristecieron las banderas en su contra en la cancha de Boca, tras la pelea con Riquelme. "No puedo jugar y eso me limita".



BUENOS AIRES.- El director técnico de la Selección nacional, Diego Maradona, admitió anoche que le dolió en el alma que lo hayan tildado de traidor en la Bombonera, en alusión a las banderas que aparecieron el fin de semana tras su cruce con Juan Román Riquelme.

"La gente tiene derecho a ponerse de parte del que quiera. Yo expliqué que a Riquelme lo convoqué, pero entienden como ellos quieren y no puedo hacer nada, más que seguir mi camino", argumentó el entrenador, y reconoció que lo sorprendió la actitud de los simpatizantes del club de sus amores.

"No me esperaba la reacción de la gente, pero no la culpo. Siempre va a tener razón el jugador, porque es el que da satisfacción al hincha. Yo estoy atado de pies y manos porque no puedo jugar más, eso me limita. No voy a entrar en una guerra de banderas que no le sirve a nadie", señaló.

En otro orden, Diego adelantó que no tiene pensado abandonar su palco en la Bombonera y que seguirá acudiendo al Estadio Alberto J. Armando para ver a los "xeneizes". "Lo último que haría en mi vida sería tener rencor con la gente de Boca. Ni por un jugador, ni por el presidente de la Nación. Pueden gritar lo que quieran", concluyó. (DyN)