Francis Picabia (67 Reproducciones)

Francis Picabia (67 Reproducciones)




Fue unartista francés nacido en 1879 que, a lo largo de sus casi cincuentaaños como artista, toca los estilos de vanguardia más diversos, desdeel impresionismo, a la abstracción, pasando por el fauvismo, elcubismo, el orfismo o el dadaísmo y, como no, el surrealismo, llegandoincluso a ser considerado por algunos críticos, como el precursor del“Hiperrealismo” y del “Pop-Art”. Estudió en l´Ecole des artsDecoratifs. Era amigo de Pisarro, lo que le llevó a practicar elImpresionismo, tras el que se pasó al fauvismo, decantándose luego porel cubismo. A partir de ese momento inicia una gran amistad con MarcelDuchamp, con lo que se inscribe en los movimientos preconizados poréste. Fue uno de los representantes más destacados del Dadaísmoagresivo encabezado por Tristán Tzara, para a continuación unirse alSurrealismo de Breton y compañía. Tras la Segunda Guerra Mundialcombinó la Abstracción con una especie de Realismo Kitsch. El artistafalleció en 1953.



Lo cierto es que se trató de un hombre de espíritu independiente,claramente defensor de la “libertad en el arte”, quien no solo se ocupóde la pintura, sino que escribió novelas, poesía y también se dedicó alcine. Su vida va a estar marcada por su gusto por el lujo y la búsquedade todo tipo de belleza, lo que se refleja en su obra por el gusto porlos tonos dorados. Fue un hombre muy rico, rodeado de yates, fiestaslujosas, bellas mujeres, etc. Es sorprendente constatar como todos susexcesos no lograron saciar su constante sed y su búsqueda constantecomo artista. Como pintor constantemente se dedicó a explorar nuevoscaminos, nuevos lenguajes, nuevas formas de expresión, no contentándosecon ninguna tendencia, buscando, siempre buscando. Su frase “Nuestracabeza es redonda para permitir al pensamiento cambiar de dirección”,define a la perfección a Francis Picabia como artista.



Una de sus obras más atípicas fue “El gato”, obra realizada en1929, pintada en un momento en el que está editando la revista “391”,fundamental para entender el Dadaísmo y también el Surrealismo. Elpintor sentía una especial fascinación por los gatos, tanta que, dehecho en esta época realizó una exposición de obras sobre los mismos enuna Galería de Cannes, puesto que el reside en la Costa Azul. Hay unaserie de autores que consideran que tal vez pueda tratarse de unautorretrato, al conectar la mirada del felino, desconfiada y a la vezdesafiante con la del artista (que se inmortalizó a sí mismo variasveces). Los colores de la obra recogen el intenso azul delMediterráneo, mezclados con colores cálidos, como el rojo teja, quedotan a la obra de una especie de romanticismo. Los amarillos que seentremezclan en su pelaje parecen ser el reflejo de un crepúsculo solarsobre su cuerpo. El pelaje del animal está construido con unaspinceladas largas, lo que le da un aspecto un tanto descuidado, queencaja a la perfección con el entorno abstracto en el que se encuentra.