Los servicios de telesecretariado se han convertido en una opción muy interesante tanto para empresas como autónomos, dados los cambios en los últimos años, entre otros motivos por el gran ahorro en costes que permiten y gran calidad de servicio que ofrecen a estas organizaciones. Delegando en un servicio de telesecretariado, una empresa pequeña se olvida de gastos de personal y estructura innecesarios.

Por ello, se mire desde el punto de vista que se mire, la secretaria virtual es la mejor opción para este tipo de profesionales. Sin embargo el desconocimiento de este servicio para muchos empresarios puede llevar a generar cierta desconfianza, ya que al ser un servicio externo muchos piensan que es como una especie de contestador automático, que toma nota de las llamadas y nada más.



Sin embargo, nada más lejos de la realidad, una secretaria virtual es una compañera de trabajo, atiende las llamadas en la forma exacta indicada por su cliente, siguiendo el protocolo indicado por él, le transfiere las llamadas, lo mantiene informado en todo momento de los movimientos que se producen en su empresa, de cualquier incidencia que pueda ocurrir, sabe que es la puerta de entrada para sus clientes y da la mejor imagen de la empresa, la única diferencia entre una secretaria física y una virtual, es que la segunda es un servicio externo y no está en su oficina, pero nadie se percata de ello, ya que la secretaria virtual atiende las llamadas de una forma tan profesional y amable que los clientes se creen que se les está atendiendo desde las oficinas y quedan satisfechos con el trato recibid, el empresario por otra parte nunca vuelve a perder ninguna llamada importante.

Y lo mejor de todo, el gran ahorro que este servicio supone, ya que el coste de una secretaria virtual es diez veces menor y la calidad del servico la misma